Álex Fraile desgrana a partir de 33 historias su contacto con el mundo de la música, sus vivencias y los viajes en un libro a degustar en pequeñas tazas
Título: Cuando Dylan me sonrió. Crónicas desenfadadas de eso que llaman conciertos
Autoras: Álex Fraile
Editorial: Ópera Prima
Colección: Guías ilustradas
Número de páginas: 268 páginas
Características: 17×24 cm rústica
Lanzamiento: febrero de 2023
Precio recomendado: 19,5 euros (aprox.)
ISBN: 978-84-9946-924-9
Hoy hablamos de Cuando Dylan me sonrió, el libro de Álex Fraile. Su subtítulo es Crónicas desenfadadas de eso que llaman conciertos.
Dicen los que saben que no has vivido hasta que has tenido un hijo, has escrito un libro y has plantado un árbol.
Álex Fraile ya puede poner un check, al menos, en el segundo punto con este libro, Cuando Dylan me sonrió. Crónicas desenfadadas de eso que llaman conciertos que recorre su memoria concertística, y también habla de su periplo vital a partir de viajes, amoríos, ahorros y trasiegos en torno a la música.
El autor lleva a cabo una revisión vital de esos espectáculos a los que ha acudido a lo largo de los años (desde el primero, junto a su tía), de las entradas que aún conserva -algunas aparecen en la portada del texto-, y de diferentes hitos secundarios, marcados en su calendario concertístico -como el día en que murió su madre-.
Trata, en fin, de sus amoríos, reales y musicales, como esa obsesión que cosechó, por influjo de su hermano a partir del disco Full moon fever (1989), en torno a Tom Petty.
Sé de lo que habla, porque un servidor tiene a quien le manda mensajes por cualquier noticia en torno a alguna banda en concreto.
Hace unos días también por la muerte de Matthew Perry. Es lo que ocurre cuando hemos estado marcados por una pila de contenidos llegados desde Estados Unidos o de ciertas majors. Cuenta en este libro lo que tuvo que hacer para llegar a verlo en directo.
Fue en la gira del 40 aniversario de la banda del rockero norteamericano. Obviamente, antes de que falleciera, en 2017.
Contenidos de esta entrada
El indie por bandera
Fraile hace un completo recorrido por la música independiente -ese es el pie del que cojea el autor-, y en ocasiones tal vez da más detalles de los necesarios sobre ciertas aficiones personales, además de contar anécdotas singulares sobre grupos y solistas.
Interesante ese episodio sobre Spin Doctors, Paco Pérez Bryan que trajo a Chris Barron en más de una ocasión por aquí. En nuestro caso ya te hablamos de las jornadas de periodismo de Salamanca.
O, curioso el hueco que otorga la publicación a la peculiar banda nórdica Sigur Ros.
Fraile celebra la vida a partir de la música y los conciertos, a partir de ese pisar medio mundo que siempre enriquece.
Como también revive nuevas perspectivas esos conciertos en los que compartes escena -que no escenario- con miles (o cientos, en su caso) de personas con las que probablemente de otra manera nunca coincidiría.
La magia del sonido.
Tópicos y un hilo conductor
En el libro, autoeditado por Álex Fraile -muy probablemente por su carácter intrapersonal, y porque él ha querido que se publicara así-, queda claro que el autor tiene las cosas muy claras.
Coincido con él en esa idea de que en la pista hay mucho más que tipos viendo a grupos que idolatran -o no, simplemente pasaba por allí-, y también en combatir esa otra de que siempre tiene que haber yin y yang, los Rolling o los Beatles, Metallica o los Guns N’ Roses, Blur u Oasis.
Sobre estos dos últimos habla, y sienta cátedra al indicar que lo suyo son otros, los Ocean Colour Scene.
Fraile hace un recorrido por su memoria musical, por bandas que han marcado a mucha gente –The Smashing Pumpkins, Patti Smith, The Black Crowes, The Rolling Stones, por supuesto Bob Dylan…- y otras más selectas, con menor recorrido pero una obvia influencia en el día a día del escritor.
Lo mejor
Son 33 historias musicales, aunque estoy seguro de que podrían ser muchas más.
Lo sabemos: la música mueve el mundo.
Y un mundo sin música sería una castaña pilonga, de las que se caen en estos días de otoño de los castaños y golpean en la cabeza.
El texto invita a la consumición en ligeras dosis, es como mejor se degusta, dado el vasto conocimiento sobre la escena independiente del escritor, que en momentos puede llegar a abrumar.
Lo peor
Yo imagino que estoy muy chapado a la antigua, o que no se me ocurriría -tal vez sea un cobarde-, pero ciertas licencias no las he entendido muy bien, en particular las referidas a gustos personales propios y particulares. Hablo de esos viajes lisérgicos, como él apunta.
Pero… sin más, no juzgo si no conozco.
Sobre el autor
Álex Fraile (Madrid, 1975) es viajero por vocación, dedica su tiempo profesional al tercer sector. Es licenciado en Derecho y especialista en Preparación y Respuesta ante Desastres.
Ha trabajado en distintos organismos humanitarios, en lugares como África Central, el oeste de África, Asia o Centroamérica.
Pero, está aquí porque su verdadera pasión es la música: en cualquier formato. Sonoro o literario.
Antes de este libro publicó El soñador errante y De viaje con Pierre Loti.
Nota
7,5/10